¿Sabían que el pancito que comemos todos los días, está hecho a partir de la variedad de trigo Triticum aestivum? Esta es una variedad hexaploide, es decir que posee 6 juegos de cromosomas, a diferencia de nosotros que poseemos solo 2. Esta característica le permite su gran rendimiento y adaptabilidad, lo que se logró a través de mejoramiento genético a lo largo de varios siglos, proceso que hoy en día puede ser llevado a cabo en menos de una década gracias a las herramientas que otorga la biotecnología.
Sabías que la
Biotecnología se remonta hace miles de años, cuando comenzó a utilizarse para
la creación de cerveza al fermentar soluciones de malta y lúpulo, o cuando la
leche comenzó a usarse para la fabricación de queso y yogurt. Aunque en ese
tiempo aún no se conocían los mecanismos de cómo ocurrían estos procesos, éstos
eran utilizados para el beneficio humano. Esta aplicación de la Biotecnología,
basada en la obtención y uso de los productos de ciertos microorganismos es
conocida como “Biotecnología tradicional”.
Sin embargo, en la actualidad se conoce el mecanismo de cómo ocurren
estos procesos biológicos, lo que ha permitido modificarlos o copiarlos para
obtener mejores productos, además de fabricar productos químicos claves para la
industria.
